Porto es el núcleo central de un área metropolitana en la que residen casi dos millones de personas. Su evolución está muy ligada al vino ya que los caldos que llevan el nombre de la ciudad salían al exterior a través de su puerto.
Pasear por las rúas del centro de la ciudad es una parada casi constante. Son multitud de establecimientos comerciales, de siglos pasados, los que todavía continúan en pie. Hablamos de preciosas farmacias, papelerías o tiendas de ultramarinos en las que por sus fachadas parece que no pasa el tiempo. Pero, sin duda, una de las más importantes muestras de este turismo comercial la encontramos en la Livraría Lello&Irmâo.
Presente desde finales del siglo XIX en la Rúa das Carmelitas, a pocos pasos de la Torre dos Clérigos, es todo un museo de las letras.
Su impresionante fachada de estilo neoclásico es un magnífico envoltorio de lo que nos vamos a encontrar en el interior. La madera es la protagonista en el suelo, en las paredes y, sobre todo, en la majestuosa escalera que nos conduce al primer piso y que se sitúa en el punto central del establecimiento. En ambos pisos conviven los viejos libros con las novedades editoriales del momento.
Sin duda una visita imprescindible para los amantes del arte y de la cultura.
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